Mostrando entradas con la etiqueta gluten. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta gluten. Mostrar todas las entradas

27 julio, 2022

Pan de Lentejas (Vegano y Sin Gluten)

Llevo ya un tiempo buscando alternativas saludables para el desayuno. Al analizar los hábitos que seguimos en casa, me he dado cuenta de que la primera comida del día no cuenta con la cantidad suficiente de proteínas y grasas saludables para ser equilibrado. Por eso estoy introduciendo alimentos que los contienen, como el atún, el pavo o jamón naturales (no fiambres), el aguacate, el sésamo tostado, etc. También he introducido las legumbres en forma de hummus. Y he de reconocer que este cambio nos está aportando más energía a lo largo de la mañana.

 

Y buscando alternativas más proteicas y digestivas al típico pan de cereales (trigo sarraceno, avena, espelta...) me he topado con uno elaborado... ¡con lentejas! Y todo ello gracias a un vídeo que me envió mi marido (sabe que me encanta todo lo que sea cocinar y las recetas diferentes). Nunca había oído hablar de este tipo de pan, y reconozco que me llamó la atención tanto como para probar. 


Como el resultado ha sido espectacular, lo comparto contigo. No requiere mucho trabajo y es rápido de elaborar. El pan queda más jugoso que el que elaboro con cereales (no utilizo trigo común), está delicioso (es suave y tiene un ligero sabor a nuez), es muy digestivo y muy nutritivo (sin ser muy calórico). 


Las lentejas tienen muchas más propiedades de las que se suele pensar. Son fuente de proteínas y también carbohidratos. Aportan fibra, vitaminas (B1, B2, B3 B6, ácido fólico...) y minerales (potasio, calcio, magnesio, fósforo, zinc, hierro...), aunque lo cierto es que conviene combinarlas con cereales para obtener todos los aminoácidos esenciales. Tienen pocas calorías (320-360 kcal. por 100 gr. de alimento seco y según la variedad), son muy saciantes y apenas aportan grasas.


Por todo ello se considera que las lentejas contribuyen a controlar el nivel de glucosa en sangre, a reducir el colesterol malo (LDL) y a subir el del bueno (HDL), a mejorar la salud cardíaca, a favorecer el tránsito intestinal... Eso sí, si crees que puedes tener una enfermedad o un desequilibrio en tu salud, debes consultar con un profesional y no fiar que se solucione por el mero hecho de consumir lentejas o cualquier otro alimento. 

 

Si a eso le sumamos el aceite de oliva y las semillas convierten a este pan en todo un descubrimiento. ¿Tienes curiosidad por cómo se elabora el pan de lentejas, vegano y sin gluten? Pues acompáñame, que abrimos el obrador... 


Pan de lentejas (vegano y sin gluten)


Ingredientes

 

400 gr. de lentejas rojas

200 ml. de aceite de oliva virgen extra

100 ml. de agua  (a ser posible filtrada)

5 gr. de levadura química

1/2 cucharadita (de las de café) de sal

Mezcla de pipas de girasol y pipas de calabaza 

 

Notas sobre los ingredientes

 

Las lentejas no necesitan remojo (especialmente las rojas) si las vas a preparar cocidas o estofadas, pero sí que es necesario hacerlo para preparar el pan. 

 

Puedes emplear lentejas de otro tipo, aunque el sabor y el color del pan cambiará. Las lentejas rojas tienen un sabor más suave que otras variedades. También son más digestivas, al no tener hollejo. 


Lentejas rojas

 

Puedes utilizar otra grasa que no sea aceite de oliva, aunque siempre será una de las opciones más saludables.  

 

Una alternativa a las pipas de girasol y calabaza es el sésamo tostado. También las semillas de amapola o frutos secos molidos.


Materiales


Batidora

Vaso de batidora

Lengua de silicona

Molde de silicona o del material apropiado para el horno que utilices


Preparación

 

Deja las lentejas en remojo la noche anterior

 

Una vez que hayan pasado al menos 8 horas en remojo, acláralas con agua limpia y escúrrelas

 

Pon las lentejas en un recipiente en el que puedas utilizar la batidora sin problemas (son 400 gr. y ocupan cierto espacio).

 

Añade el agua, el aceite y la sal a las lentejas. Incorpora también la levadura.


Aceite de oliva

 

Bate todo hasta que quede con una consistencia cremosa. No hagas un batido largo, porque el electrodoméstico se puede recalentar. Hazlo en varias veces, dejando unos instantes de descanso entre una batida y otra. 

 

Unta un molde de silicona con aceite de oliva, ayudándote de un pincel.

 

Vierte la mezcla, dale unos pequeños golpecitos al fondo del molde sobre la encimera, para conseguir que se asiente.

 

Esparce las semillas en la parte superior del molde.

 

Deja que repose unos 15-20 minutos y mételo en el horno. Si usas el microondas, te será suficiente con unos 15-20 minutos a 600 W. Yo lo hice en dos veces, pinchando el pan con un cuchillo fino, hasta que en la segunda hornada salió ya limpio. Si vas a utilizar un horno convencional, precaliéntalo a 180ºC y hornéalo durante unos 25 minutos. En cualquier caso, como cada horno es un mundo, ve comprobando la cocción cada cierto tiempo. 

 

Pan de lentejas

 

Deja que se enfríe completamente antes de lonchearlo. Una vez que lo tengas cortado, puedes colocarlo en una bandeja. Tápala con papel film y métela en el congelador durante unas horas. Una vez que las rebanadas estén duras, puedes separarlas y colocarlas en una bolsa para congelación. Así siempre tendrás pan disponible. Descongela bastante bien, así que puedes dejarlas en la nevera la noche anterior, dejarlas al aire libre unos minutos antes o utiliza el microondas. 

 

Pan de lentejas

 

Cuando desmoldes y cortes el pan te sorprenderá la textura, jugosidad y sabor.

 

¿Te animas a probar este pan? Si lo haces, me encantaría que me comentases el resultado.



 

Post relacionados:

3 Recetas de Pan Muy Fáciles

Consejos para Conservar el Pan en Casa 

18 Harinas Más Allá del Trigo Común

 

La primera vez que apareció el post Pan de Lentejas (Vegano y Sin Gluten) fue en el blog de La Meiga y Su Caldero. 


Licencia de Creative Commons
Pan de lentejas (vegano y sin gluten) by La meiga y su caldero - Arancha Moreno is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.

01 mayo, 2019

Goma Xantana: Características, Propiedades y Usos

¿Has oído hablar alguna vez de la goma xantana? Salvo que sufras de celiaquía o te dediques a la nutrición o la elaboración de alimentación comercial es probable que eso de xantana te suene a guitarrista famoso o a princesa guerrera de serie de fantasía.


Pero a pesar de tan original y sonoro nombre, la goma xantana es un ingrediente realmente útil en tu cocina. Si te interesa sabes qué es y para qué usarla, te invito a que continúes leyendo este post. 


Goma xantana: características, propiedades y usos


Qué es


La goma xantana (también conocida como goma xántica, xantano o xantan) es un aditivo natural, un polisacárido que procede de la fermentación del maíz (o de la lactosa o la soja) con una bacteria llamada "Xantomonas Campestris".


Dónde encontrarla


Lo encontrarás en muchos productos comerciales, identificado como E-415. Aunque lo veas con esa nomenclatura, debes saber que es de origen natural.


Aunque puedes comprarla en establecimientos de alimentación y herbolarios para utilizarla en casa, como cualquier otro ingrediente.


Características


Es un polvo entre blanco y color beige que tiene un aspecto parecido a la levadura o la harina fina de maíz.


Cuchara con goma xantana


No tiene apenas calorías y no aporta grasas, por lo que puedes consumirla sin problemas si estás siguiendo una dieta baja en cualquiera de las dos. 


Cuenta con una cantidad de fibra dietética importante, lo que la convierte en una aliada contra el estreñimiento.


Es saciante, puesto que capta líquidos del intestino y se expande; de ese modo genera sensación de saciedad.


Su capacidad de espesar y estabilizar no requiere una concentración muy alta, por lo que no tendrás que utilizar grandes cantidades en tus preparaciones. 


Se disuelve fácilmente en líquidos, tanto fríos como calientes.


No aporta sabor ninguno a las preparaciones, por lo que puedes usarla sin miedo de modificar el sabor de tus platos.


Para que calcules la cantidad, ten en cuenta que la legislación impone un máximo de 10 gr. por kilo de harina en la industria alimentaria, así que puedes utilizar esta proporción en tus recetas de repostería y panadería, o incluso puede ser menor. Te recomiendo que leas las instrucciones en el envase o que vayas añadiendo poco a poco la goma, hasta que consigas la textura que deseas.


Espolvoreando goma xantana sobre harina para preparar una masa


La cantidad recomendada al día para un adulto es de 15 gr. diarios


Propiedades


Espesante


Tiene la ventaja de que cuando ha llegado a su límite de espesura o viscosidad se mantiene estable, aunque calientes o enfríes la preparación en la que la hayas utilizado. Es decir, si haces una salsa en caliente con goma xantana y luego se enfría, no va a solidificarse más, lo que te ayudará a obtener en punto justo de viscosidad sin sorpresas. Verás una gran diferencia a la hora de espesar salsas con goma xantana y con otros productos como el agar-agar. Este último puede darte más de un disgusto si espesas con él, puesto que puede que si pones más cantidad de la debida (sólo un poco más), al retirar la salsa o la crema del fuego te encuentres con una masa compacta.


Es perfecta para espesar y ligar masas de repostería, galletas, empanadas, pizzas y panes.


Amasando sobre una encimera


En el caso de los helados y los batidos te permitirá eliminar una buena parte de las grasas, puesto que al espesarlos y darles un punto untuoso, no necesitarán nata y otros lácteos grasos.


Puedes utilizarla para darle consistencia a las espumas, mousses y a la nata montada.  


Aporta textura y firmeza a los quesos y patés para untar.


Espesa las salsas sin necesidad de aportarle nata y otros lácteos o harinas.


Salsa


Incluso puedes utilizarla para hacer esferificaciones, puesto que aporta viscosidad y firmeza a los líquidos que vayas a utilizar.


Si quieres una mayor viscosidad, puedes añadirla goma guar o algarrobo, porque se crea una sinergia entre ellas y son capaces de espesar mucho más. 


Estabilizante


Se puede utilizar para evitar que se formen cristales de hielo en los helados y para estabilizar los sorbetes y granizados. En el caso de los helados tiene también la capacidad de crear minúsculas burbujas de aire, lo que les aportará cremosidad y volumen.


Helado


También se usa para este mismo fin en los yogures y otros productos lácteos como la leche con cacao, las cremas con base de mantequilla, las cremas de queso, las coberturas de chocolate y los rellenos que se usan en bollería.


Permite que las salsas y emulsiones de mantengan estables durante mucho tiempo.


Mantiene la fruta, las especias y otros condimentos en suspensión en el caso de los zumos o cócteles.


Smoothies verdes


Sustituto del gluten, al aportar consistencia, elasticidad y humedad.


Con la goma xantana podrás preparar pan, repostería y masas saladas con la misma textura (o casi) que las que llevan gluten.


Efectos adversos


En caso de que tengas un sistema digestivo sensible, de que tomes ciertos medicamentos o consumas una cantidad superior a la recomendada al día (15 gr.), puedes notar hinchazón en el abdomen y gases, incluso náuseas y vómitos. Lo cierto es que llegar a superar los 15 gr. es sumamente difícil, puesto que se emplea poca cantidad al cocinar y, aunque tomes goma xantana en muchas preparaciones al cabo del día, no llegarías a excederte.


Tambien en cosmética


La goma xantana también se usa para otros fines, como por ejemplo en farmacia o en cosmética. En este último caso, el de la cosmética, puedes usar este ingrediente para hacer tus propias cremas, geles de baño o champús, aprovechando sus propiedades gelificantes, espesantes y emulsionantes.


¿Te animas a utilizar este ingrediente en tu cocina o a la hora de preparar tus cosméticos?




Post relacionados:

Alternativas al Huevo en la Cocina
18 Harinas Más Allá del Trigo Común
La Harina de Amaranto y sus Usos
Qué Es el Trigo Sarraceno y cómo Utilizarlo 
Cómo Cocinar la Avena en Grano


La primera vez que apareció el post Goma Xantana: Características, Propiedades y Usos fue en el blog de La Meiga y Su Caldero


Licencia de Creative Commons
Goma xantana: características, propiedades y usos by La meiga y su caldero - Arancha Moren is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.

19 diciembre, 2018

18 Harinas Más Allá del Trigo Común

Si piensas en repostería, en pan, en pasta o rebozados probablemente tu mente los asocie automáticamente con la harina blanca de trigo, como mucho con la versión integral de ese mismo cereal. Salvo que sufras de celiaquía, claro, porque en ese caso probablemente conozcas más variedades de cereales.


Y es que, efectivamente, hay harinas de todo tipo con las que puedes cocinar. Procedentes de cereales, de semicereales, de legumbres, de frutos secos o de tubérculos, estas harinas son sabrosas, interesantes nutricionalmente hablando (muchas de ellas mucho más que el trigo común) y de lo más versátil. De hecho, puedes combinarlas entre sí para conseguir diferentes texturas, sabores y comportamientos a la hora de cocinarlas.


Así que si quieres introducir variedad en tu dieta, si te gusta experimentar en la cocina o si quieres eliminar el gluten en tu dieta, a continuación encontrarás información básica sobre harinas distintas del trigo común o harinero. Están ordenadas por orden alfabético y en cada una de las descripciones verás si tiene gluten o no.


Venga, vamos a meternos en harina...


18 harinas más allá del trigo común


1.- De almendra

(Sin gluten) 


Se obtiene de la molienda de las almendras crudas y peladas.


Tiene muchas propiedades nutricionales y un sabor muy agradable, que recuerda totalmente al fruto seco entero. Y es muy digestiva.


La puedes usar para hacer repostería, postres, sopas dulces, etc.


Utiliza la mitad de harina de almendra que usarías de la de trigo, puesto que absorbe mucho líquido.


Almendras


2.- De altramuz

(Sin gluten) 


Su sabor recuerda a esa legumbre.


Con ella puedes preparar pan, repostería o rebozados.


Las masas preparadas con harina de altramuz quedan densas, así que tendrás que mezclarla con otras harinas, con clara de huevo o con goma guar para obtener más volumen y esponjosidad.


3.- De amaranto

(Sin gluten)


Otro pseudocereal bastante interesante para incluir en tu despensa.


Se puedes usar para hacer pasta, repostería, papillas, cremas, guisos y pan, siempre que lo combines con otras harinas que hagan que la masa suba, porque el amaranto es no panificable y no leva.


Amaranto


4.- De arroz

(Sin gluten)


Puedes encontrarla procedente de arroz integral o de arroz blanco, y se trata de una harina con mucho almidón. Combina a la perfección con recetas que lleven huevos o leche.


La versión integral la puedes utilizar en repostería y pastelería, aunque las masas resultarán muy densas, por lo que conviene que las mezcles con otras harinas.


La harina blanca de arroz tiene un sabor bastante neutro, por lo que se suele utilizar para espesar salsas, dejándolas muy melosas, o para rebozar y para preparar tempuras deliciosas. Es muy común en los productos para celíacos.


En caso de que quieras hacer pan con harina de arroz, tendrás que combinarla con otras harinas, porque no panifica. La harina de castaña o la de trigo sarraceno son perfectas para mezclarlas con la de arroz.


5.- De avena

(En principio la avena no tiene gluten naturalmente, aunque hay celíacos que no pueden consumirla por la contaminación cruzada de este cereal con otros que sí lo contienen o por sus prolaminas -aveninas-, que tienen una estructura similar a la del trigo, la cebada o el centeno. Si sufres de celiaquía, mi consejo es que antes de consumirla consultes siempre con un especialista)


La harina de avena tiene unas propiedades nutricionales excelentes, es digestiva y muy agradable al paladar.


Cuenta con una ventaja añadida, que es su resistencia al enranciamiento.


Con esta harina puedes preparar gachas, papillas, postres, repostería, pan, tortitas, rebozados, bechamel


Es semipanificable, así que si quieres hacer masas esponjosas y que leven bien, tendrás que mezclarla con otras harinas.


Avena


6.- De castaña

(Sin gluten)


Procede del proceso de moler castañas secas.


Es una harina muy cara y difícil de encontrar. Muy densa y sabrosa, si la vas a mezclar con otras harinas, éstas deben tener un sabor neutro.


Puedes usarla para hacer repostería, pan, flanes, rebozados, croquetas, salsas, crepes, frixuelos, etc.


Te recomienzo que la combines con otras harinas más baratas, puesto que su sabor y propiedades permiten que no haga falta una gran cantidad de este ingrediente en ninguna receta.


7.- De centeno

(Con gluten)  


Tiene un sabor intenso, profundo y dulce. Su color es algo oscuro.


La harina de centeno (Secale cereale) la puedes encontrar integral y blanca.


Es ideal para preparar panes densos (panificable) y muy sabrosos.


También la puedes usar para preparar masa madre, porque tiene una actividad enzimática muy intensa. 


8.- De espelta

(Con gluten) 


Es una harina procedente de un cereal antiguo, parecido al trigo común.


Se digiere bastante bien y tiene un sabor potente y muy agradable.


Normalmente vas a encontrarlo en su versión integral, más saludable y económica. También hay una versión blanca, aunque es mucho más difícil de encontrar y más cara.


La espelta (Triticum spelta) puedes emplearla para lo mismo que el trigo común, eso sí, si vas a hacer una receta que en origen indica trigo común, ten en cuenta que necesitarás únicamente 3/4 de la cantidad que marque la receta. Es decir, si te dice que necesitas 400 gr. de harina, tendrás que poner únicamente 300 gr. de harina de espelta, porque en caso contrario la masa te quedará muy seca y densa.


Si quieres que las masas te queden más ligeras, tendrás que mezclarla con otros cereales con más gluten como el trigo común, aunque es perfectamente panificable.


Pan y pasta de espelta


9.- De garbanzo

(Sin gluten) 


Su aroma y sabor son bastante intensos, recuerda mucho al garbanzo cocido o tostado, pudiendo resultar incluso amarga si no se usa junto con otras harinas.


Para neutralizar el sabor intenso se puede añadir a la harina un chorrito de vinagre.


Se usa para hacer tortillitas de camarones, frituras de pescado y otros rebozados, tortillas veganas, cocas, pizzas, para hacer pan (con otras harinas), e incluso como sustituto del huevo, puesto que sirve para ligar y apelmazar.


Es no panificable, por lo que tendrás que mezclarla con otras harinas si quieres que la masa suba.


10.- De guisante

(Sin gluten)


Procede de esa legumbre seca y molida. Le aporta a cualquier plato un tono verde, de lo más original.


La puedes usar en crepes, empanadillas, croquetas, galletas saladas, tortillas, guisos, purés, cremas o salsas, eso sí, siempre con platos salados.


Ten en cuenta que no es panificable, como el garbanzo, así que necesitas combinar estas harinas si quieres que la masa suba.


Guisantes en su vaina


11.- De kamut

(Con gluten) 


Su nombre real es Khorasan Kamut®, es una variedad de trigo antigua y se trata de una marca registrada.


Es más digestiva que la del trigo común y tiene muchas propiedades nutricionales, además de un rico e intenso sabor, como a nuez.


Puedes usarla como el trigo común, aunque la masa quedará algo más densa. Queda perfecto para hacer pan, repostería, crepes, galletas, salsas, rebozados, pasta... Es totalmente panificable.


Puedes usarla sola o acompañada de otras harinas.


Amasando con un rodillo


12.- De lenteja

(Sin gluten)


Se trata de una harina muy digestible, con un sabor ligero y dulzón que recuerda a los frutos secos.


Empléala para hacer albóndigas, croquetas o hamburguesas veganas. También para preparar rebozados, tortillas o crepes.


Puedes usarla para hacer repostería, aunque te recomiendo que la mezcles con otras harinas, puesto que no leva.


Lentejas


13.- De maíz

(Sin gluten)


Es un tipo de harina muy versátil y con un sabor agradable y algo dulzón. La puedes encontrar en distintas versiones:



  • Integral: la puedes usar en repostería, para hacer pan, para espesar salsas y para rebozar. Su color es amarillento.

  • Almidón de maíz: la famosa Maicena, la puedes utilizar para espesar, para hacer postres, en repostería...

  • Maíz precocido y luego secado. En su versión de molido más grueso, polenta, es ideal para hacer riquísimas guarniciones. Si su molienda es más fina, sirve para hacer empanadas, tortillas o arepas.

  • Maíz tostado: se usa para hacer pan, repostería, empanadas muy crujientes, e incluso gofio.


Esta harina se puede utilizar sola, aunque es semipanificable, por lo que tendrás que mezclarla con otras si quieres que las masas suban y sean más esponjosas.


Se enrancia con facilidad, así que evita comprar mucha cantidad de una sola vez y cuida su conservación, almacenándola en un lugar fresco y seco, preferentemente en un recipiente hermético.

 
Harina de maíz


14.- De quinoa

(Sin gluten) 


La quinoa (Chenopodium quinoa) es un pseudocereal, con un sabor y un aroma potentes, que recuerda a la avellana o la nuez.


Es fuente de proteínas, hierro, zinc o vitaminas, además de ser muy digestible.


Es perfecta para hacer panes o repostería, aunque requiere combinarla con otras harinas para que la masa suba. 


Si vas a mezclarla con otras harinas, procura que estas sean de sabor más neutro. Usa 1/2 de la cantidad que usarías de trigo común para hacer tus recetas.


15.- De tapioca

(Sin gluten) 


La tapioca procede de la yuca, y más que una harina, se trata de un almidón. La harina se obtiene de la raíz de la yuca.


Se digiere muy bien y es perfecta para las personas que sufren de gastritis o acidez.


Su sabor es neutro, por lo que tendrás que combinarla con otras harinas si quieres que tenga más sabor. Aunque precisamente por su falta de sabor, podrás emplearla para espesar salsas sin que se resienta el resultado final.


Si la vas a  usar sola, puedes hacer pudding, flan o una especie de papilla o gachas dulces.


También la puedes usar para hacer quiches, crepes o rebozados.


Tapioca


16.- De teff

(Sin gluten) 


El teff  (Eragotis tef) es de color oscuro y con un sabor intenso, como a pan integral.


Es perfecta para hacer repostería, crepes, empanadas, horneados, pastas, guisos, sopas, cremas o salsas. Incluso te servirá para hacer masa madre a pesar de ser semipanificable.


Pero, cuidado, que se suele vender mezclada con trigo común, así que fíjate en la etiqueta si eres celíaco o no incluyes el gluten en tu alimentación. 


17.- De trigo sarraceno (alforfón)

(Sin gluten)


El trigo sarraceno (Fagopyrum esculentum) no tiene nada que ver con el trigo común o harinero (Triticum aestivum), puesto que se trata de un pseudocereal. Tiene fibra, proteínas y vitaminas. Su color es algo grisáceo y tiene tendencia a enranciarse rápidamente, así que te aconsejo que lo conserves con cuidado y que no lo guardes indefinidamente en tu despensa. Sólo lo vas a encontrar en su versión integral.


Tiene un sabor muy agradable y combina perfectamente con otras harinas.


Puedes utilizarlo para hacer repostería, crepes, gachas, fideos soba, tortitas, bechamel e incluso pan, aunque deberás mezclarlo con otras harinas que panifiquen mejor (trigo, centeno, espelta, maíz, trigo, kamut...), porque es semipanificable y, si no la combinas, la masa te quedará muy densa.


Úsalo con harina de arroz, de maíz, espelta, kamut o fécula de patata.


Trigo sarraceno


18.- De tritordeum

(Con gluten)  


El tritordeum es un cereal creado por el CSIC con técnicas naturales, a partir de trigo duro y cebada silvestre. Su color es algo amarillento debido a su contenido en luteína.


Tiene un bajo contenido en gluten, así que los celíacos deben evitarla.


Tiene un buen sabor y se usa exactamente igual que el trigo común.


Como ya has visto, hay muchas harinas más allá de la del trigo común y que puedes introducir en tu alimentación.  ¿Te animas a probarlas?





Post relacionados:

La Harina de Amaranto y Sus Usos
Cómo Utilizar la Avena en Grano
Qué Es el Trigo Sarraceno y Cómo Utilizarlo 


La primera vez que apareció el post 18 Harinas Más Allá del Trigo Común fue en el blog de La Meiga y Su Caldero.


Licencia de Creative Commons
18 harinas más allá del trigo común by La meiga y su caldero - Arancha Moreno is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.

03 febrero, 2016

Bizcocho de Chocolate, Avellanas y Copos de Avena

Si te gusta el chocolate y las avellanas, espero que este bizcocho también lo haga. Es una receta sencilla, horneada en microondas, que no te llevará más de 25 minutos, cocción incluida. Vamos, que no tienes excusas para no hacer esta receta de repostería express.


No lleva leche, mantequilla ni huevos, así que es ideal para vegetarianos y veganos. No es apto para dietas sin gluten, aunque con unos pequeños retoques puedes adaptarlo si es tu caso.


Está realmente delicioso y, aunque no es precisamente light, sí que es nutritivo y con unos ingredientes saludables; por lo que es un capricho que te puedes dar de vez en cuando.


Aquí tienes la receta...


Bizcocho de chocolate, avellanas y copos de avena


Ingredientes


100 gr. de harina integral de trigo sarraceno
150 gr. de harina integral de maíz
100 gr. de harina integral de espelta
150 gr. de copos de avena
225 gr. de azúcar integral de caña
200 gr. de aceite de oliva virgen
1 vaso grande de bebida de avena
100 gr. de avellanas
4 cucharadas soperas de cacao puro en polvo
2 plátanos medianos
1 cucharadita de postre de levadura química


Notas sobre los ingredientes


  • Las cantidades de este bizcocho son para uno de gran tamaño o dos pequeños, porque me gusta tener para varios días. Ten en cuenta que puedes congelarlo sin problemas. Si lo quieres más pequeño, sólo tendrás que escalar las cantidades. 

  • Las harinas de esta receta pueden ser sustituidas por harina de trigo o por cualquier otro tipo de harina que te agrade, tanto refinada como integral. Mi consejo es que utilices harinas integrales, porque son más nutritivas y saludables, aunque tengan las mismas calorías que las refinadas. 

  • Aunque leas en los ingredientes trigo sarraceno o alforfón, no se trata de un tipo de trigo, sino de un pseudocereal que no contiene gluten.

  • Si eres celíaco o sigues una dieta sin gluten, puedes cambiar la espelta y la avena por otros productos más adecuados para ti.


Ingredientes del bizcocho de chocolate, avellanas y copos de avena
     
  • Los copos de avena de la receta son de los grandes. Así se mantienen más enteros durante la cocción y no se deshacen tanto, además de retener mejor la humedad.


  • En cuanto al azúcar, te propongo que sea integral, aunque puedes utilizar su versión refinada o edulcorante. En este caso la cantidad no es excesiva para que no quede demasiado dulce, si eres muy goloso tendrás que incrementarla. 

  • La bebida de avena la puedes sustituir por leche de vaca u otra bebida vegetal. Por cierto, si al mezclar los ingredientes ves que el resultado es muy espeso, puedes añadir más cantidad de líquido. El cacao puro tiende a resecar el bizcocho, por lo que no importa si la mezcla queda algo más clara de lo habitual. 


  • El cacao en la receta es puro y semidesgrasado, porque es el que más me gusta, al tener más sabor y no contar con azúcar extra. Puedes utilizar cualquier otro tipo de chocolate en polvo que te guste; aunque si es muy dulce, quizás tengas que ajustar la cantidad de azúcar.

  • Si tienes alergia a los frutos secos puedes cambiar las avellanas por chips de chocolate, pasas o cualquier tipo de fruta en trozos. 

  • Hablando de avellanas, las de la receta son tostadas. 

  • Utilizo plátanos en lugar de huevo, porque soy intolerante a la clara. Si prefieres la opción del huevo, puedes poner 2 de tamaño XL.


Materiales


Batidora
Mezcladora/amasadora de varillas
Bol
Vaso de batidora
Molde de silicona
Pincel de silicona


Preparación


Pica la mitad de las avellanas y resérvalas. Te aconsejo que no utilices el molinillo eléctrico, sino un cuchillo. De esa forma quedarán trozos más grandes que le darán un toque más rústico al bizcocho. 


En un bol mezcla las harinas, la levadura, los copos de avena, el azúcar y el aceite. Procura que todos los ingredientes queden bien unidos. Puedes mezclar a mano, aunque te recomiendo que utilices una mezcladora eléctrica. 


En un vaso de batidora coloca la otra mitad de las avellanas, los plátanos en trozos, el cacao y la bebida de avena. Bate todos los ingredientes hasta que quede con la textura de unas natillas ligeras.


Une la primera mezcla (harinas, avena,  levadura, azúcar y aceite) con el batido anterior. También te sugiero que utilices la mezcladora eléctrica. Procura que todo quede bien unido.


Unta un molde de silicona con aceite de oliva ayudándote de un pincel y rellénalo con la masa que has obtenido. Espolvorea unos copos de avena en la parte superior.


Bizcocho de chocolate, avellanas y copos de avenaHornea en el microondas durante 10 minutos. Los 6 primeros minutos a máxima potencia (en este caso 720 W) y los 4 últimos a 500 W. Deja reposar en el micro durante unos minutos. Si vas a hacer el bizcocho más pequeño, no te olvides de reducir los tiempos de horneado.


Ajusta los tiempos según las potencias y características de tu microondas. La primera vez sería interesante que estuvieses pendiente de la cocción. En el caso de que tu microondas caliente más por unas zonas que por otras, siempre puedes ir moviendo el bizcocho a lo largo del horneado para que se haga por igual.


Luego saca el molde de silicona, tápalo con una servilleta limpia y déjalo reposar de nuevo hasta que se temple.


Una vez templado ya puedes desmoldarlo... y disfrutarlo. 


Consejo plus


Para darle un toque más goloso, puedes preparar una salsa de chocolate caliente, negro y/o blanco para servirla con el bizcocho. 




Post relacionados:

Alternativas al Huevo en Repostería 
Bizcocho de Maíz y Almendras
Bizcocho de Plátano y Zanahoria 
Bizcocho Integral "Sinfonía Naranja


La primera vez que apareció este artículo fue en el blog de La Meiga y su Caldero.


Licencia de Creative Commons
Bizcocho de chocolate, avellanas y copos de avena by La meiga y su caldero - Arancha Moreno is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.

08 abril, 2015

Muffins de Frutos Rojos y Chocolate Negro

¿Te apetecen unos deliciosos muffins de frutos rojos y chocolate negro, pero no tienes tiempo? Pues no tienes excusas, porque estos que te propongo apenas te llevarán 20 minutos, porque se hornean con microondas.


Y, además, estos muffins son perfectos para celíacos y alérgicos e intolerante al huevo.


Aquí tienes la receta...


Muffins de frutos rojos y chocolate negro

 
Ingredientes


200 gr. de harina de maíz
200 gr. de harina de trigo sarraceno
140 gr. de aceite de oliva virgen extra
140 gr. de azúcar integral de caña
1 cucharadita de levadura Royal
200 gr. de frutos rojos (fresas, frambuesas, arándanos, grosellas y moras)
1 plátano grande
50 gr. de chocolate negro en tableta
Nueces para decorar


Notas sobre los ingredientes


  • Como siempre, puedes sustituir la harina de maíz y de trigo sarraceno por la que más te guste. 

  • El aceite de oliva lo puedes cambiar por otro aceite vegetal, por margarina o por mantequilla.

  • Si te gusta mucho el dulce, aumenta la cantidad de azúcar, porque estas cantidades están calculadas para que sean poco empalagosos. También puedes optar por los edulcorantes como la estevia
 
    Frutos rojos
  • Si no tienes a mano frutos rojos, puedes aprovechar la temporada de fresas, que ahora están en su punto. Si lo haces así, pica una parte de las fresas en daditos pequeños. Yo suelo tener bolsas congeladas de estos frutos, así puedo utilizarlos todo el año.
 
  • El plátano de la receta es para reemplazar el huevo. Si lo prefieres, cambia esta fruta por un huevo XXL o por dos pequeños.
 
  • El chocolate que uso en esta receta es en tableta, pero puedes cambiarlo por pepitas de chocolate. Si no te gusta que sea muy amargo, puedes utilizarlo con leche o blanco.


Materiales


Moldes de silicona para magdalenas
Moldes de papel para magdalenas
Batidora 
Batidora para amasar
Vaso de batidora
Bol


Preparación


ChocolatePica el chocolate con un cuchillo o rállalo con un rallador grueso y resérvalo.


En un vaso de batidora pon los frutos rojos, pero guarda un puñado de grosellas y arándanos. Estas frutas enteras se verán en el muffin y le darán sabor, color y textura.


Si sólo vas a utilizar fresas, bate una parte de ellas y reserva las que hayas cortado en cuadraditos. Añade el plátano y bátelo todo bien. 


En un bol mezcla las harinas, la levadura, el azúcar y el aceite y mézclalo. Añade el batido de los frutos rojos y el plátano y amásalo bien. Si tienes batidora para amasar, te resultará más fácil. 


Si ves que la mezcla queda muy espesa, puedes añadirle zumo de granada o naranja, leche de avena o yogur para aclarar la mezcla. 


Incorpora el chocolate, las grosellas y los arándanos (los que has reservado enteros, o en su defecto los cuadraditos de fresas) y vuelve a amasar, esta vez de forma ligera.


Pon los moldes de papel dentro de los de silicona, para que la masa no deforme el papel y los muffins queden más bonitos y recogidos.


Moldes para magdalenas
Los moldes de silicona sujetan los de papel y así el muffin queda perfecto... y se lavan con más facilidad.


Rellena entre la mitad y las 3/4 partes del molde, para que la masa no rebose cuando suba en el horno.


Yo remato la faena poniéndoles 1/4 de nuez encima para decorar. Este truco no es solamente decorativo, también es útil. Cuando horneas distintos sabores de magdalenas y su aspecto es parecido, es más fácil distinguir cada una si tiene algo que la identifique, es este caso, un fruto seco.


MicroondasHornéalos en el microondas de 3 minutos y medio a máxima potencia. En cualquier caso, ten cuidado mientras se cuecen, porque cada horno es un mundo y dependerá de cuántos muffins vas a meter en el horno. El tiempo que te doy es el que necesita mi microondas para hornear 6 unidades. 


Ojo, porque como tienen chocolate, se queman rápidamente si están más tiempo del que deben en el horno. 


muffins de frutos rojos y chocolate negro
Quedan oscuros por los frutos rojos, no porque se hayan quemado ;)


Déjalos enfriar y ya están listos para comer. Puedes conservarlos varios días en la nevera dentro de un tupperware. Eso sí, deja que pierdan bien la humedad antes de guardarlos.


La preparación no te llevará más de 20 minutos, desde que entres en tu cocina y hasta que pongas todos los muffins en una bandeja. Una receta rápida, para que no pongas pretextos a la hora de hacer repostería casera. 

 
¡Que los disfrutes!




Post relacionados:

Magdalenas de Queso Arzúa y Compota de Pera Magdalenas Integrales de Anís
Magdalenas de Limón y Queso Fresco 
Muffins... ¡de Guisantes! 
Muffins de Chocolate y Naranja Amarga