Cómo Cuidar Tus Complementos de Esparto

Ahora que ya (casi) estamos en verano, es hora de sacar nuestras alpargatas, cestos y sombreros de esparto u otras fibras naturales. La pregunta es: ¿han sobrevivido de la temporada pasada a ésta?

 
Aunque parece que el esparto no es un material noble, sí que necesita cuidados para estar impecable durante y tras la temporada de verano. Así que aquí tenéis algunos consejos para conseguirlo:

 
Para mantener perfectas las alpargatas

 
Si las alpargatas tienen barro o están húmedas, lo más adecuado es dejar que se sequen y cepillarlas para quitar cualquier resto de barro o polvo.


Para limpiar el esparto, espolvoreadlo con polvos de talco, dejad reposar y terminad con un buen cepillado. La suciedad se pegará a los polvos de talco y será fácil eliminarla con el cepillo. También se pueden limpiar con agua y jabón, aplicándolos con un cepillo, terminando con una pasada con un paño húmedo para eliminar la suciedad y restos de jabón. Después hay que dejarlas secar bien. Si las manchas del esparto son muy difíciles, en lugar de jabón, añadid al agua una cucharada de amoníaco.

 
La tela o la lona de las cuñas y alpargatas se debe lavar con agua y jabón suave, eso sí, no caigáis en la tentación de lavar el calzado entero (y menos en la lavadora), sólo la tela. Luego terminad con una pasada con un paño húmedo para rematar la faena.


Si la alpargata lleva cuero, este material hay que limpiarlo con un producto específico. Y no olvidéis seguir las indicaciones del fabricante.


Para guardarlas de un año para otro, limpiadlas bien, ponedles papel de periódico en el interior para que mantengan su forma y almacenadlas en cajas de cartón o en bolsas de tela y a salvo de la humedad. También las podéis envolver en papel de periódico. Y, al guardarlas, no olvidéis de limpiar la suela, no sólo por higiene, así evitaréis que se manchen entre sí con el roce.

 
Para que vuestros cestos y sombreros estén impecables


Aplicad clara de huevo y zumo de limón en toda la superficie. Hacedlo con un pincel o brocha. Luego sólo tendréis que dejar que se seque y frotar bien con un paño para sacarle brillo.


Otra forma de limpiarlos y dejarlos perfectos, es humedecer el material y aplicar sal gorda por la superficie con suaves movimientos circulares (así no levantaréis la fibra). Una vez seco, sólo tendréis que frotar con un cepillo.


También se pueden limpiar y blanquear cestos, bolsos y sombreros de esparto frotándolos con una paño humedecido en una solución preparada con 1/2 l. de agua y 1 cucharada de agua oxigenada (otra opción es mezclar a partes iguales agua y zumo de limón). Después debéis dejar que seque bien y frotar con un paño o un cepillo.

 
Es importante que, como en el caso de las alpargatas, guardéis cestos y sombreros limpios y secos, rellenos de papel de periódico para que mantengan la forma y guardados a salvo de la humedad y los cambios de temperatura.

 
Consejos plus

 
Dejad secar bien los complementos que estéis limpiando, especialmente antes de guardarlos para la próxima temporada.

 
A la hora de secar alpargatas y cestos, no os olvidéis de hacerlo a la sombra, especialmente si en la limpieza habéis usado amoniaco, agua oxigenada o limón; pueden aparecer manchas o dañar el esparto.


Si estáis limpiando en húmedo, tened cuidado de no frotar con excesivo ímpetu o levantaréis la fibra al estar más débil. Una vez bien seca la pieza resiste bien el cepillado enérgico.


Una forma de retirar el polvo de vuestros complementos de esparto es pasarles el aspirador con un cepillo apropiado. 


Si vais a utilizar amoníaco, os sugiero que lo utilicéis perfumado, porque dejará un aroma más agradable.