El Papel de Armenia

Hace tiempo leí en una revista una reseña que hacía referencia al Papel de Armenia y sus propiedades aromáticas y de eliminación de malos olores en el hogar, incluso comida, humedad o tabaco. He de reconocer que no suelo creer mucho en los remedios milagrosos para quitar el olor a comida en la casa, que es uno de mis caballos de batalla, pero me encantó su nombre, tan evocador... Papier D'Arménie, Papel de Armenia. Así que busqué información en Internet y lo probé: ¡vaya descubrimiento! Sí funciona.

No sólo desodoriza y refresca el ambiente, también deja un aroma suave pero tres chic.

He probado el tradicional y el de rosa y me encantan los dos.

Os invito a que visitéis la página web de Papier D'Arménie para conocer su historia y curiosidades. Es un producto que se lleva usando desde 1885 así que es, por así decirlo, de confianza. Es interesante saber, entre muchas otras cosas, que en un principio era un papel medicinal por su características antisépticas, cicatrizantes y desodorizantes. 

Aquí en España se usó hasta la Guerra Civil, dejando de comercializarse desde entonces; aunque ahora ya podemos seguir disfrutando de sus bondades. Seguro que algún familiar o conocido anciano conoce el Papel de Armenia de haberlo visto en su casa.

Se comercializa en forma de libritos con varias hojas. Cada hoja está compuesta por tres tiras que se pueden separar de forma individual al estar perforadas. Las tiras se doblan en forma de acordeón y se prenden como si fuese incienso para que se quemen poco a poco (no hay que dejar que haga llama). Cuando se van quemando van desprendiendo un humo aromático que es el que elimina los malos olores, desinfecta y refresca el ambiente. 

Además, es un producto respetuoso con el medio ambiente y con la salud de las personas; algo a tener en cuenta.

El Papel de Armenia de rosa es ideal para perfumar los armarios. Pon una tirita en el armario y/o cajones y verás qué olor más agradable y encantador deja. Para los armarios y cajones de los chicos, es más adecuado el tradicional, con su aroma a benjuí.