Si doblamos mal el sujetador con relleno a la hora de guardarlo en nuestro cajón de la ropa interior, podemos encontrarnos con una desagradable sorpresa al ponérnoslo de nuevo: se han deformado sus copas y han aparecido unas antiestéticas arrugas que ni las de la momia de Tutankhamon. Y una chica no puede consentir algo así...
Es habitual doblar el sujetador por la mitad, metiendo una copa dentro de otra. Con ésto se fuerza a la copa que se dobla dentro de la otra a tomar otra forma diferente de la natural, deformándose y arrugándose.
Mantener nuestra ropa interior en perfectas condiciones durante más tiempo es fácil, sólo tienes que seguir las instrucciones del siguiente vídeo:
Si no puedes ver el vídeo, pincha aquí
Esa forma de doblarlo sólo sirve para algunos sujetadores... de los que dispongo yo ahora mismo, no se lo podría hacer a ninguno... con lo que tocará doblarlos como hasta ahora....
ResponderEliminarCierto. Hay algunos que tienen la parte central muy ancha y no se puede. Esto pasa, sobre todo, con los de sin tirantes.
EliminarPara eso lo mejor es colocarlos estirados unos encima de otros en un cesto o una cajita aparte. Los que son anchos los tengo así y se mantienen en perfecto estado. Saludos, Buffy.
EliminarGracias por el comentario, Miriam. Es cierto que con algunas hechuras no sirve este método y que hay que recurrír al tradicional. Aunque, siempre que se pueda, esta forma evita que se deformen antes de tiempo. Saludos.
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