¿Te Animas a Preparar un Brunch en Casa? (I)

Están de moda, son divertidos y ofrecen muchas posibilidades. ¿De qué hablo? Del brunch. Si quieres saber más, sigue leyendo.

En esta primera parte de contaré el qué, el porqué, el quién, el cuándo y el cómo del brunch. En la segunda te hablaré del menú, de la decoración y ambientación y, por supuesto, de algunas ideas que te pueden ser útiles a la hora de organizar un brunch 10.

 
Vamos a ello..

¿Qué es un brunch?

Está entre el desayuno y la comida. Breakfast + lunch = brunch.  Más potente que un buen desayuno, pero más ligero que una comida.

Y, si lo tuyo es la tarde-noche, también lo puedes ofrecer en su versión drunch.  Dinner + lunch = drunch. La clásica merienda-cena de nuestro país, pero más cool.

¿Por qué un brunch?

Porque es una forma de recibir a tus amigos y familia en casa de una forma original y divertida.

Porque te permite celebrar ocasiones especiales de una forma diferente: cumpleaños, aniversarios, Navidad o Año Nuevo, fiestas de housewarming… incluso bodas.

¿A quién invitar?

A familiares y amigos cercanos, porque se crea un ambiente muy agradable y cálido.

A gente que aún no conoces bien, pero a quien quieres ofrecer tu hospitalidad de una forma más relajada que en una comida o cena formales. Por ejemplo, si quieres que tu pareja conozca (por fin) a tus padres.

¿Cuándo  ofrecer un brunch?

El mejor momento para el brunch es entre las 12 y las 15 h.

La teoría dice que en nuestro país, como somos más tolerantes con los horarios, se puede servir entre las 11 h. y las 16 h., pero lo recomendable es hacerlo entre las 12 h. y las 15 h. La lógica dicta que si se va a servir un brunch a una hora muy tardía, sería más lógico que fuese una comida al uso.

Cada forma de servir la comida tiene su momento.

¿Cómo preparar el espacio?

Es importante tener previstas distintas zonas: una para el salado, otra para el dulce, otra para las bebidas y otra (aunque sea auxiliar) para la colocación del menaje (vajilla, cubertería, servilletas, etc.).

Otro de los imprescindibles en el brunch es tener habilitados espacios libres para poder dejar los platos y vasos sucios. Luego sólo tendrás que ir despejando esas zonas cuando sea necesario. Si no, tus invitados se verán obligados a llevar el menaje usado hasta la cocina o dejarlo donde puedan. 

No sólo será un gesto poco hospitalario por tu parte, es que te costará mucho más recoger y limpiar después de la fiesta.

También tendrás que tener previsto algo de espacio para que los invitados puedan circular por las distintas zonas y, por supuesto, lugares para que puedan sentarse o estar de pie conversando. Intenta, en la medida de lo posible, que tus invitados no sientan que están unos encima de otros como si se tratase de una partida de Tetris

Si el tiempo te lo permite, organízalo en el exterior, es mucho más agradable.

Tipo de servicio

El brunch y el drunch se preparan como si fuesen un buffet, es decir, cada uno se sirve por su cuenta.

Es más relajado y cómodo y, además, te permitirá estar más tiempo con tus invitados.

Mesas

Aunque no se trata de una comida o cena sentados al más puro estilo tradicional, sí será necesario disponer de asientos para acomodar a la mayoría de los invitados.

Puedes preparar distintas zonas para que se acomoden: la terraza o el jardín, el comedor, el salón, etc. Sólo tienes que colocar estratégicamente sillas, taburetes y mesitas auxiliares para que se puedan sentar si lo desean.

Ojo, las mesas donde expongas la comida deben estar vestidas con sus correspondientes manteles.

Menaje

Debería ser elegante pero sencillo, porque no se trata de una comida formal. 

Un diseño divertido sería muy apropiado.

No te olvides de los cubiertos de servir adecuados para cada plato.

El menaje debe ser suficiente para todos los invitados. Mi opinión: mejor que sobre. No te gustará nada tener que lavar rápidamente cubiertos o copas, porque se han ensuciado todas. 


Una idea que puedes tener en cuenta es alquilar el menaje, hay empresas que te lo pueden proporcionar por poco dinero.

Y, por favor, aunque sea muy cómodo olvídate de platos y cubiertos desechables. Un brunch lleva su tiempo de preparación, no lo desluzcas por ahorrarte un poco de trabajo a la hora de limpiar.

Otro consejo importante: nada de servilletas de papel. Tampoco cuesta tanto trabajo poner una lavadora y, las servilletas de tela, le dan otra prestancia a cualquier comida.

Coloca todo el menaje en las zonas donde se vaya a necesitar: platos y cubiertos al principio de las mesas de dulce y salado, copas y vasos al principio de la mesa de las bebidas, etc.



Y hasta aquí llega la primera parte de este artículo.


¡Te espero en la segunda entrega!