30 marzo, 2022

Cómo Utilizar el Colorete en Barra o en Crema

Si hacemos una encuesta para saber qué productos de maquillaje consideramos imprescindibles cualquiera de nosotras, en los primeros puestos aparecerían la máscara de pestañas, el labial o el lápiz de ojos. Esos que elegiríamos sin dudar si nos pidiesen que renunciásemos a todo nuestro neceser de maquillaje salvo uno o dos artículos. 


Pues bien, el colorete probablemente no sería uno de esos productos de maquillaje, aunque es uno de los que obra milagros sobre cualquier rostro. De hecho, el ansiado efecto buena cara no sería posible sin él. Sobre todo cuando es en formato stick o en crema. 


Por eso en este post quiero comentarte cuáles son las ventajas del blush en barra o en crema, cómo elegirlo y cómo aplicarlo

 

Cómo utilizar el colorete en barra o en crema

 

Las ventajas

 

El blush en crema tiene una textura que facilita notablemente su aplicación. Aunque haya muchas usuarias que nunca se han acercado a este tipo de formatos, porque piensan que su uso es complicado y su resultado artificial, lo cierto es que ocurre justo lo contrario.


Deja un rubor más natural que el tradicional, más jugoso y luminoso, al fundirse mucho mejor con la piel. 

 

Si eliges el tono y la intensidad correctas conseguirás un aspecto saludable y juvenil como por arte de magia. 



Los inconvenientes


Si no se usa bien, es posible excederse en la cantidad y terminar pareciendo una muñeca... o incluso un payaso.


La elección

 

Es una textura ideal para todo tipo de pieles, sobre todo aquellas con la piel seca o madura. El único tipo de piel para el que no funciona bien el colorete en crema es la grasa, puesto que no se fija ni se difumina bien. 


Si tu piel es clara, apuesta por los tonos neutros y rosados. Los colores ciruela también son una opción, pero únicamente si quieres un toque dramático y sofisticado.


Las pieles oliváceas se ven favorecidas por tonos melocotones, anaranjados y dorados. 


Las pieles más oscuras requieren corales intensos, colores teja y rojos profundos como los de las bayas.

 

Los tonos albaricoque, melocotón y los rosas son adecuados para todas las pieles, sobre todo para las maduras. Los rojos auténticos sientan bien a todas las pieles, reavivando su color. 

 

 

Los malvas y los tonos más azulados son complicados, por lo que es mejor que los dejes para los profesionales del maquillaje.

 

Cómo aplicarlo

 

Antes de utilizar cualquier tipo de maquillaje, tu piel debería estar completamente limpia e hidratada, también en el caso del colorete. El hecho de que la piel esté hidratada permite trabajar mejor el blush y que éste se integre con ella.

 

Una vez que tu piel ya esté preparada, puedes aplicarte base de maquillaje, una BB o CC Cream o dejar la piel desnuda si quieres utilizar blush en barra, porque queda bien en cualquier caso. Yo lo suelo utilizar a menudo para conseguir un efecto buena cara sin necesidad de maquillarme y me encanta el resultado.

 

Las prebases o primers, tanto si vas a utilizar base como si prefieres la piel natural, son una manera estupenda de que el colorete se aplique mejor y que dure más.

 

Si vas a utilizar base de maquillaje, lo ideal es que tenga una textura ligera y cremosa, porque el colorete en crema no funciona bien con bases en polvo.  

 

Hay quien prefiere utilizar primero el colorete y luego la base o la BB Cream para lograr un resultado supernatural. 


A la hora de aplicar el blush puedes hacerlo con los dedos o utilizando una brocha. En mi caso, si llevo la piel desnuda, lo extiendo con los dedos, Y si me aplico base o BB Cream, uso una brocha. 

 

En caso de que te decidas por los dedos, recuerda que tus manos deben estar completamente limpias y secas.

 

Si empleas una brocha, primero ponte el colorete en el dorso de la mano y luego ve tomándolo de ahí para depositarlo en las mejillas. De esa forma podrás regular mejor la cantidad de producto que recoge la brocha.

 

También puedes ayudarte de una esponja de maquillaje ligeramente humedecida con agua termal.  


 

Aplícate el colorete en las manzanas de las mejillas. Para saber el sitio exacto, sonríe frente al espejo y verás que hay una zona que sobresale más. Pues ahí es donde debes comenzar a trabajar.  De todas formas, no llegues muy cerca de la nariz, ya que el resultado no será natural. 


También puedes explorar otras formas de utilizar el colorete, más allá de tus mejillas.


 

Deposita el blush con pequeños toques en las mejillas, no lo hagas pintando un circulo muy marcado, porque te será difícil difuminarlo.

 

Difumínalo hacia arriba y en dirección hacia las sienes y las orejas.

 

Si el color es muy natural y similar al de tu piel cuando se broncea, también puedes poner una pequeña cantidad en el puente de la nariz.


Para que el resultado sea natural, es imprescindible que difumines muy muy bien, porque en caso contrario puedes terminar con el aspecto de una muñeca.


Te aconsejo que primero te pongas una pequeña cantidad, que la extiendas y que compruebes si su intensidad es la que buscas o no. Si necesitas subir el color, extiende capas poco a poco hasta que consigas el tono deseado. Es más fácil ir añadiendo intensidad que eliminar el exceso. 

 

Si te has pasado con el color, no te preocupes, porque todo tiene solución. Puedes retirar el exceso utilizando una esponja de maquillaje, aplicándola con pequeños toques para difuminar y eliminar el producto sobrante con cuidado. Evita frotarlo, porque terminarás extendiéndolo por toda tu cara, además de retirar la base de maquillaje que lleves debajo. También puedes utilizar una brocha o esponja, ligeramente impregnadas de base de maquillaje o crema con color para rebajar la intensidad del colorete. 


Puedes sofisticar el maquillaje de tus mejillas utilizando un iluminador y/o un bronceador o contorneador de un color más oscuro. Ambos productos deben ser también en crema, para que el resultado sea óptimo. El iluminador irá en la parte superior de los pómulos y el bronceador en la zona más hundida de las mejillas. Para localizar ese punto, frunce los labios y verás que hay una zona cóncava, pues ahí es el lugar en el que tienes que utilizar el color más oscuro. De esta forma esculpirás tus pómulos suavemente, evitando que tu rostro parezca plano. 

 

No renuncies a darle color a tus mejillas, es más fácil de lo que parece.



Post relacionados:

Errores Frecuentes al Maquillarse (II): Ojos, Mejillas y Labios 

Cómo Arreglar Errores de Maquillaje de Forma Sencilla 

¿Es Buena Idea Aplicarse las Sombras con los Dedos? 

Claves para Acertar con el Rojo de Labios

 

La primera vez que apareció el post Cómo Utilizar el Colorete en Barra o en Crema fue en el blog de La Meiga y Su Caldero.


Licencia de Creative Commons
Cómo utilizar el colorete en barra o en crema by La meiga y su caldero - Arancha Moreno is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Estamos encantados de que nos dejes tus aportaciones, porque tu opinión es importante para nosotros. Sólo te pedimos que, por favor, no publiques links ni contenidos publicitarios de ningún tipo, porque estos no serán publicados. Si deseas anunciarte, contacta con nosotros previamente. Gracias.