Cuando Tu Gato Mayor "Dispara Fuera del Área"

"Luna", una de las reinas de la casa

Hoy vengo mascotil y os traigo un truco para minimizar los problemas que conlleva que, los gatos que son ya mayores o que tienen problemas de movilidad, se hagan pis fuera del cajón de arena.


Os cuento la historia de este truco:


Al principio, pensábamos que nuestra gatita Luna (14 años) se hacía pipí en la entrada del cajón para llamar la atención. Pero en casa llegamos a la conclusión de que, si el motivo fuese ese, se orinaría en la cama, en las alfombras o en los cajones de la ropa; más bien parecía una abuelita a la que no le ha dado tiempo a llegar al WC... así que fuimos a consultar al veterinario. 


Después de algunos análisis y pruebas, el diagnóstico era claro: la gata pensaba que había metido su lindo traserito dentro del cajón y actuaba en consecuencia, es decir, vaciando la vejiga. Con un pequeño detalle sin importancia: su mitad posterior estaba fuera y las aguas menores, pues también. Por lo visto, algunos gatos cuando son mayores tienen menos sensibilidad en las patas y piensan que han tocado arena, en lugar de suelo puro y duro... y total, para qué se van a esforzar si ya están jubilados ;)


Una de las veterinarias de la clínica también tiene una gatita abuelilla y me dio un súper-truco: poner una bandeja grande debajo del cajón para que, si se hace pis fuera, caiga dentro de la bandeja y no moje el suelo. Además de ser más fácil de limpiar y desinfectar (bañera y lejía, directamente) cuando se moja, se evita que el suelo se manche, algo importante cuando es de madera. El pis de gato se filtra en la madera y no hay quien elimine el olor, si no se tiene cuidado.

Como véis, el truco es encontrar una bandeja grande y con un borde que pueda retener el líquido

A este excelente truco, mi chico le añadió un plus (si es que cuando se pone, se pone <3) para hacerlo más eficiente: echar un poquito la arena para atrás dentro del cajón para que la gata perciba mejor dónde comienza la sepiolita. Es una forma de engañar a sus patitas y a su cerebro para que se esfuerce más a la hora de entrar hasta el fondo del cajón.

Como podéis observar en la foto, sólo hay que desplazar un poco la arena del borde del cajón

Y, así, nuestra gatita ya dispara menos veces fuera del área de juego y no tenemos que andar utlizando lejía para limpiar el parquet y poniendo ambientadores, algo de agradecer. ¡Ah, y tendréis que recoger menos arena de suelo, porque casi toda caerá en la bandeja, que se puede sacudir con facilidad! Ja, ja, ja, veo que todos los que tenéis amigos felinos estáis poniendo cara de felicidad: ¡no estar recogiendo sepiolita toooodo el día, yujujú!


Este es el caso de nuestra gatita pero, de cualquier forma, consultad con el veterinario antes para descartar posibles enfermedades, porque también puede haber otros motivos: problemas de artritis que les impiden subir el escalón del cajón, neurológicos que les dificultan llegar a tiempo o problemas de tipo renal.


Espero que os sirva el truco a los que disfrutáis como nosotros de un gato longevo, que es todo un privilegio.





También os puede interesar:


Averigua la equivalencia de la edad de tu gato en años humanos.
Adopta un gato con "Madrid Felina". Cómo cuidar a un gato cuando envejece.