Mantén Siempre Limpios los Envases de los Cosméticos

Los envases de los cosméticos se suelen ensuciar mucho. Los tocamos con las manos engrasadas o manchadas con otros productos y, como normalmente siempre vamos con prisas, no los limpiamos tras su uso, que sería el ideal (inalcanzable) de usuaria responsable. De hecho, hay algunos productos que parece que están diseñados para que se ensucien irremediablemente, por mucho cuidado que se tenga, como el rímel y el brillo de labios. 

 

Y la cierto es que un envase sucio esconde riesgos importantes para tu salud, porque suele ir acompañado de bacterias, hongos y levaduras, que pueden causar todo tipo de problemas a tu piel o a tus ojos. Eso se traduce en brotes de acné, dermatitis, infecciones, problemas oculares... Por no hablar de que su duración y su efectividad se ven comprometidas si no se conservan en buenas condiciones.

 

 

Por eso es imprescindible que mantengas los envases de tus cosméticos lo más limpios posible. 

 

✽ Antes de limpiar, comprueba cuánto tiempo llevan abiertos los productos, su fecha de caducidad y su estado. Si ni te acuerdas cuándo compraste los cosméticos, si están caducados desde hace tiempo o están en mal estado, no pierdas el tiempo y deséchalos. 

 

✽ Evita los productos de limpieza para el hogar, sobre todo aquellos que sean muy agresivos. Si queda algún residuo en el exterior, puede terminar en tu piel cuando te apliques el cosmético. Y si lo empleas en el interior, puedes poner en riesgo tu piel o tu salud en general.  

 

✽ No compartas nunca tus cremas y productos de maquillaje, especialmente los que te pones en labios y ojos. Es muy fácil que se contaminen, y el hecho de limpiarlos no va a evitar que te contagies.  

 

 

 

✽ Para limpiar las barras de labios, limpia el exterior con un poco de agua y jabón o con agua micelar. Si prefieres la primera opción, utiliza un paño de microfibra limpio con el agua jabonosa, aclara con agua limpia (con otra zona del paño que no haya utilizando antes) y seca bien. En el caso del agua micelar, aplícala con un disco de algodón que no suelte pelusa, deja que se seque y luego pule con otro disco nuevo o con un paño limpio. 

 

✽ El interior del capuchón lo puedes dejar en perfecto estado ayudándote de un bastoncillo de algodón, con cualquiera de los dos trucos anteriores. Incluso te sirve el alcohol, puesto que en esa zona no corres el peligro de dañar la decoración exterior. Es importante que el bastoncillo no suelte fibras, para que no se contamine. 

 

✽ Si la barra de labios en sí no está en buenas condiciones, puedes utilizar una cuchilla o un cuchillo con un buen filo, que estén previamente desinfectados. Corta la parte que quieres desechar y ya está lista para que uses de nuevo.

 

 

✽ En el caso del gloss, te recomiendo que limpies el exterior con agua y jabón y que el interior del capuchón lo trates con alcohol o con agua micelar, y con un bastoncillo de algodón. Lo ideal es darle una pasado con un bastoncillo para retirar todo el producto y luego limpiarlo con otro nuevo y el alcohol o el agua micelar. Con un tisú y un poco de alcohol, limpia bien la varilla del aplicador. En el caso de la esponjilla, creo que lo mejor es quitar la primera capa de producto con un pañuelo de papel y no hacer nada más. Si utilizas alcohol, puede que modifiques la fórmula del brillo de labios al volverlo a introducir dentro del tubo, así que es preferible no hacer más. Si el gloss está muy baqueteado, es mejor desecharlo que limpiarlo, por seguridad. 

 

✽ A la hora de tratar productos en polvo, primero elimina cualquier resto suelto ayudándote de un pincel o una brocha bien limpios. Luego limpia el interior, tanto el borde como el espejito con un algodón impregnado en alcohol y deja que se seque completamente. Termina pasando otro algodón con agua micelar (o agua y jabón) por el exterior. 

 

✽ Hay quien usa alcohol isopropílico, pero en mi caso prefiero el de 96º que puedes encontrar en farmacias, parafarmacias y droguerías.

 

 

✽ El alcohol lo puedes utilizar puro o diluido con agua. En el primer caso, tiene la ventaja de que se evapora rápidamente y que no hay peligro de que quede ningún rastro de humedad en aquello que limpies. En el segundo, el hecho de que haya agua, implica que al mantenerse más tiempo en la superficie (no se evapora tan rápidamente), podrás extenderlo y frotarlo mejor, además de evitar que queden rastros sobre el plástico o el espejo.  

 

✽ Cuando uses jabón, procura que sea neutro, porque así protegerás tu piel y evitarás que se dañen las superficies que limpias. Y hazlo siempre en poca cantidad, porque en caso contrario te costará mucho aclararlo y casi seguro que quedan residuos.

 

✽ Si no tienes a mano alcohol, agua micelar o agua y jabón, siempre puedes recurrir a las socorridas toallitas desmaquillantes. No es la mejor opción, pero peor es dejar los envases de los cosméticos sucios. 

 

Mantener los envases de los cosméticos limpios no es un capricho, sino una cuestión que afecta a tu salud y a tu seguridad. 

 

 

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La primera vez que apareció el post Mantén Siempre Limpios los Envases de los Cosméticos fue en el blog de La Meiga y Su Caldero.  

 

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