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17 diciembre, 2024

Cómo Atraer la Suerte y la Prosperidad para el Año Nuevo

Estamos a punto de finalizar el año y probablemente estés haciendo balance de cómo ha sido para ti y de aquello que echas de menos en tu vida. Y generalmente lo que más deseamos tener, además de amor y salud, es suerte y estabilidad económica. 


Por eso quiero compartir contigo algunos rituales que se pueden hacer para atraer la suerte, la prosperidad y la felicidad para el Año Nuevo. Algunos de ellos son propios de esta época, pero otros los puedes poner en práctica también en cualquier otro momento. 


No sé sin realmente funcionan o no, pero lo que sí que sé es que son bonitas tradiciones, que invitan a expresar deseos e ilusiones. Muchas de ellas están hechas para compartirla con los familiares y amigos, lo que para mí ya es algo que merece la pena. Y algunas de ellas tienen un punto lúdico, lo que también es atractivo. ¿Quieres conocerlas?


Cómo atraer la suerte y la prosperidad para el Año Nuevo


Por el principio


Para realizar cualquiera de los rituales que te detallo a continuación es muy importante que te prepares antes. Eso significa que el lugar debe estar limpio (físicamente y energéticamente), que lo hagas con tiempo y tranquilidad, que hagas unas cuantas respiraciones profundas, que pongas toda tu intención en lo que quieres conseguir y que agradezcas mentalmente (y de corazón) todo aquello que ya tienes.


Toma la escoba


Si quieres barrer las malas vibraciones de tu hogar durante el nuevo año, lo único que tienes que hacer es limpiar bien la casa y barriéndola desde el interior hacia la puerta. Ten cuidado de tirar lo que barras fuera de tu hogar, de modo que si lo pones en la basura, no te olvides de sacarla antes de que den las campanadas. Y si quieres un extra de protección, hay quien recomienda incluso desechar la escoba con la que barras. 


Escoba

 

Agua va

 

Otro ritual que ayuda a evitar las lágrimas y la mala suerte durante el año que comienza, es arrojar un balde de agua (o un vaso si quieres evitar conflictos con las personas que caminen por la calle) por la ventana, asegurándote la felicidad y la prosperidad. 


Vaso con agua


Enciende la luz


Otra tradición dicta que para que la suerte y la riqueza entren en casa con el año nuevo, hay que recibirlo con todas las luces encendidas de la casa. No sé si atraerá la prosperidad, pero lo que sí que tengo claro es que costará una fortuna.


Ponte de pie o da un portazo

 

Otro ritual, es recibir al nuevo año de pie, para atraer la suerte, el dinero, la salud y el amor.

 

Y hay una tradición que dicta que hay que dar un portazo para cerrarle la puerta en las narices (de forma literal y figurada) a los malos espíritus, alejándolos de la casa. 


Puerta roja abierta

 

Borreguito


En México tienen un bonito ritual que consiste en poner un borreguito (generalmente de peluche) en una zona importante de la casa, ya sea la entrada o en la habitación que consideres la principal de tu hogar. Este dulce animalito simboliza el trabajo duro, pero que es recompensado. Atrae la fertilidad y la abundancia. Si quieres un efecto extra, coloca monedas o billetes rodeándole. También hay quien regala borreguitos a su familia o amigos para que tenga abundancia económica todo el año.


Plantas


Decora cualquiera de las plantas que atraen el dinero y la suerte con cintas (a ser posible doradas), con monedas y otros elementos que simbolicen la fortuna y el éxito. Colócala en un lugar apropiado (debe quedarse allí todo el año) el día 31 y cada vez que la veas, la riegues o la cuides, dale las gracias y pide suerte, abundancia y estabilidad. 


Planta china del dinero

 

Hay una planta, el orégano, que se puede utilizar para atraer el dinero. Se puede utilizar orégano seco o fresco, también una vela de color verde o dorado, sal (marina y gruesa) e incienso. Primero elimina las malas energías utilizando la sal (o quemando incienso), espolvoreándola en la zona o limpiándola con agua salada. En un recipiente coloca la vela rodándola con orégano. Enciende la vela y deja que se consuma, mientras lo hace, puedes meditar sobre lo que deseas y agradecer lo que ya tienes (también puedes escribirlo en dos listas, si te ayuda a enfocarte mejor). Cuando la vela se haya consumido, guarda el orégano (y el papel, si es que has escrito), pero hazlo en un lugar en el que lo tengas constantemente a la vista, y cada vez que la prestes atención, reflexiona sobre la marcha de tus objetivos y agradece aquellos que ya se hayan ido cumpliendo.  


Otra opción es utilizar romero. En este caso, lo ideal es emplear romero fresco, aunque si no lo tienes a mano, puedes recurrir al seco. Busca las facturas o tickets de tus últimas compras y prepáralas (si las tienes que guardar de cara a Hacienda, fotocópialas). Escribe 7 veces (número que atrae la suerte) una frase en la que expreses el deseo de que todo el dinero que hayas gastado volverá a ti multiplicado 70 veces. Luego quema tanto el romero como los comprobantes de compra. Entierra las cenizas resultantes en una maceta, en el jardín o en un parque, pensando en que devuelves a la tierra parte de lo que te ha dado. 


Romero en flor con una mariposa


Suerte gastronómica


En España se comen 12 uvas, 1 por campanada, para atraer la suerte el año nuevo. En otros países de Iberoamérica se pide un deseo por cada uva. Son 12, de modo que cada una simboliza un mes del año que empieza. Después de comerlas uvas se brinda por los 365 días que comienzan.


Uvas dentro de un vaso


En Portugal en lugar de uvas se comen 12 pasas con las campanadas.


Las lentejas se asocian con las monedas de oro, por lo que hay muchas tradiciones relacionadas con ellas. En Italia se suele comerlas con las campanadas, Otra es ponerlas por toda la casa en pequeños recipientes o incluso regalar a otros monederos con estas legumbres para asegurar la fortuna y la abundancia.  

 

Hay una especia de lo más común que sirve para que la prosperidad y la abundancia llegue a tu casa. No tienes más que poner un poco de canela en polvo en la mano derecha, colocarte en la puerta de casa mirando hacia dentro. Sóplala (hacia el interior) pensando en que cuando la especia se esparza la riqueza llegará a tu casa (o tu negocio, si lo haces en él) para quedarse. ¡Ah! Y no barras la canela hasta que el menos haya pasado 1 día completo.


Ropa


Ponte ropa interior del color que corresponda a aquello que quieres atraer. Aunque suele pensarse que debe ser siempre roja en esta fecha, lo cierto es que cada tono significa algo diferente. El blanco, simboliza la serenidad, la paz y la armonía. El amarillo el dinero, el éxito y la creatividad. El rosa simboliza el amor en general, la dulzura y la generosidad. El rojo el amor romántico y la pasión. El verde tiene que ver con la salud y también con la esperanza. El azul con la fidelidad, la tranquilidad y la estabilidad. El morado significa espiritualidad y sabiduría. Lo ideal es que la ropa interior se estrene ese día, para que sus efectos te acompañen todo el año. 

 

En cuanto a la ropa interior, hay otro ritual que consiste en ponérsela del revés durante las últimas horas del año. Al dar las campanadas hay que darles la vuelta y llevarlas ya de su forma habitual. Esto atrae la suerte, la fortuna y tener mucha ropa nueva el año que comienza.


Lencería de color rojo junto con una botella pequeña de champán y flores

 

Y siguiendo con la ropa, hay la creencia de que si se estrena ropa la noche del día 31 de diciembre es una manera de atraer la suerte para el año que comienza y en el que no faltará el dinero.  


Una moneda en el zapato


Coloca una o varias monedas dentro del zapato. Se recomienda que sean doradas o que tengan un cierto valor, ya sea económico o sentimental. Se dice que deben ponerse en el zapato derecho y que no deben retirarse hasta bien pasadas las 12 para que la fortuna económica te acompañe durante todo el año. Cuando coloques las monedas, visualiza que cada paso del camino durante los pŕoximos 365 días te encaminen a la prosperidad.


Saca la maleta


Si lo que deseas es viajar mucho todo el año que comienza, lo único que tienes que hacer es salir con una maleta a la calle según den las 12 y dar la vuelta a la manzana. Si tienes interés en algún destino en particular, puedes poner una imagen o un libro de viajes de ese lugar dentro de la maleta. El tamaño también importa, por lo que se recomienda que la maleta sea grande. Y si quieres que los viajes sean al extranjero, debes poner tu pasaporte en su interior. Ojo, que estos viajes no tienen que ser obligatoriamente físicos, si lo que buscas es recorren un camino de autoconocimiento o de transformación también puedes llevar a cabo este ritual. 


Maleta de cuadros, pasaportes, mapas y lupa

 

Listas


También puedes escribir dos listas. Una de ellas con todo lo negativo que te ha sucedido y otra con todo lo que quieres atraer a tu vida. Quema la primera lista antes de las campanadas para deshacerte de ello y conserva la segunda con enrollada con un lazo en un lugar secreto. Cuando llegue la Nochevieja siguiente comprueba todo lo que se ha cumplido y, en caso de que quede pendiente, pásalo a una nueva lista (si te sigue interesando) y quema esos deseos anteriores junto con la lista negativa del próximo año.

 

Para terminar, deseo que el año que comienza te traiga paz, armonía, salud, amor, alegría, prosperidad y suerte. Y si puede ser, que sigas leyendo este blog...



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La primera vez que apareció el post Cómo Atraer la Suerte y la Prosperidad para el Año Nuevo fue en el blog de La Meiga y Su Caldero. 


Cómo atraer la suerte y la prosperidad para el año nuevo by La meiga y su caldero - Arancha Moreno is licensed under CC BY-NC-ND 4.0

01 agosto, 2018

Ideas para que los Niños Consuman de Forma Responsable

Asociamos el consumo responsable con una elección ética, consciente y crítica de los productos o servicios que vamos a consumir, de tal manera que podamos cubrir nuestras necesidades, sin poner en riesgo la economía personal o familiar, que no se comprometa la salud, que no se malgasten los recursos naturales, que no se fomente la producción irresponsable con los trabajadores o con los recursos naturales y que genere la menor cantidad de residuos posible. Esto se resume en saber por qué, cómo, dónde, cuándo y por cuánto consumimos.


Lo cierto es que cada vez somos más responsables a la hora de consumir, o al menos eso quiero creer. Pero para que el número de personas que lo hacen aumente día a día, es necesaria la educación y la concienciación. Y eso comienza desde que los consumidores son pequeños, muy pequeños. 


Por eso, en este post quiero darte algunas ideas para que los niños que te rodean, ya sean tus hijos, tus nietos o tus sobrinos, aprendan a consumir de forma más responsable. La buena noticia es que los peques aprenden rápidamente y al final son ellos los que acaban dándonos lecciones a los adultos. 


Te invito a que sigas leyendo...


Ideas para que los niños consuman de forma responsable


Da ejemplo


El mejor consejo de todos es: dale ejemplo. No puedes pedirle a un niño que no consuma de forma compulsiva si te ve hacerlo a ti. Si ve que actividad a la que dedicas más tiempo es a comprar, si en lugar de llevarles al parque o a realizar alguna actividad lúdica o cultural les llevas a un centro comercial a pasar la tarde, si se da cuenta de que adquieres artículos innecesarios que luego desequilibran la economía familiar, si desperdicias comida o energía sin ton ni son, si antepones lo material a otras cosas... cómo evitarás que sea un consumidor irresponsable ahora, y en el futuro.


Enséñale que hay cosas realmente importantes que no cuestan dinero y que son realmente gratificantes: una divertida tarde en el campo con la familia, jugar con amigos sin necesidad de juguetes que hayan sido comprados o de ir a lugares que precisen el pago de una entrada, salir a pasear con la mascota, escuchar un cuento de los abuelos... Y para eso es necesario que los primeros perciban que hay cosas estupendas que no implican comprar o pagar sean los padres, porque es la única forma de transmitirlo después a los hijos. 


Niños jugando en el campo


Acaba con el tabú del dinero


Habla de dinero con él, adaptando el nivel del discurso a su edad y sus capacidades. Al igual que se conversa de otros temas que conciernen a la familia, también se puede hablar de la economía, al fin y al cabo es algo que afecta a todo el núcleo familiar. No debería ser un tema tabú, a pesar de que en España no estamos acostumbrados a hacerlo con naturalidad, a ninguna edad. 


Instrúyele en lo que es el dinero y las formas de pago, como las tarjetas de crédito, para que sepan realmente qué implican.


Enséñale el valor del dinero. Una forma de hacerlo es darle una pequeña paga para que aprenda a administrarlo. Puedes convenir con el peque lo que pagará con su minisueldo: chuches, pequeños caprichos... Otra forma de que se den cuenta de lo que supone el dinero es pagarle pequeños trabajos (no aquellos que suponen su contribución natural a la familia) o enseñarle el número de horas que papá o mamá tendrían que trabajar para comprar ese juguete del que se ha encaprichado. Y, por supuesto, supervisa en qué se gastan el dinero. 


Ahorro en familia


Fomenta su cultura del ahorro. Además de enseñarle lo que supone el dinero, a la par hay que sembrar la semilla del ahorro. Regálale una bonita hucha, mejor aún si es de las que han de romperse para recuperar las monedas. De vez en cuando puedes hacer con el niño o la niña un ejercicio que consista en preguntarle qué le gustaría hacer con ese dinero ahorrado, contar lo que ya tiene y lo que le falta para alcanzar esa meta. Y, por supuesto, no tomes dinero de su hucha si necesitas monedas sueltas o si no te apetece ir al banco, respeta su pequeña economía... para que también lo haga cuando sea mayor.


¿Es necesario?


Enséñale la diferencia entre lo necesario y prescindible. Eso no significa que no pueda tener caprichos de vez en cuando, pero sí que tenga claro que primero hay que cubrir las necesidades y que no hay ninguna obligación por parte de los padres, de los tíos o de otras personas cercanas de proporcionarles caprichos. De ese modo, cuando sean mayores, sabrán aplicarse esa diferencia en su economía particular.


Cuando se encapriche de algo (y sin enfadarte) pregúntale el motivo real por el que quiere tenerlo. No te conformes con un porque sí o porque me gusta. Intenta profundizar más, para que sea el propio peque el que se de cuenta de la razón por la que lo desea.


Compartir, una gran idea


Anímale a compartir. De vez en cuando, haz limpieza de juguetes y dona los que estén en buenas condiciones. En algunos parques hay iniciativas de madres y padres que ponen juguetes en común para que todos los niños que usen el espacio puedan jugar con ellos, y si no es el caso del parque donde juega tu niña o tu niño, pon tú en marcha una de estas bolsas de juguetes.


Dale alas a su imaginación


Fomenta su creatividad, para que pueda confeccionar sus propios juguetes y objetos decorativos, en lugar de comprarlos siempre. Estarán entretenidos, darán rienda suelta a su imaginación y le darán más valor a las cosas. La mejor manera de hacerlo, comenzar a hacer manualidades con el niño y luego dejar que sea él quien lo haga por su cuenta.


Niños haciendo manualidades


Pequeñas acciones, grandes logros


Enséñale a apagar las luces o los aparatos eléctricos cuando no sean necesarios. Es importante hacerlo desde que son muy pequeños para que luego repliquen esa actitud de adultos. Para animarles a ahorrar electricidad, puedes valorar lo que supone la factura de la luz en hora de trabajo de papá y mamá, enseñarles cómo funciona la electricidad y de dónde viene, etc.


Cuando llegue le comienzo de curso, puedes optar por el uso de segunda mano de material escolar y libros de texto. No todo tiene que ser nuevo para ser útil. 


Del mismo modo, muéstrale que también se debe ahorrar agua. Pídele que cierre el grifo mientras se cepilla los dientes, dúchale en lugar de bañarle, dile que hay que cerrar el grifo mientras se enjabona y enséñale otras formas de ahorrar agua en casa.


Instrúyele para que todo lo que se abra en casa, se consuma siempre. De esa forma no se desperdiciará ni comida ni otros productos.  


Introduce en su dieta productos locales y de temporada y explícale el por qué se consumen esos alimentos en lugar de otros más exóticos. Es bueno para su salud, para la economía familiar y para los productores cercanos a tu localidad. 


Plato de verduras con forma de flor para niños


Enséñales a comprar también en establecimientos locales y procura ir siempre a los mismos. Y es que no todo son centros comerciales y grandes superficies. De esa forma ayudarás a esos pequeños negocios y le enseñarás que ir a comprar también es un hecho social y basado en la confianza. 


En la medida de lo posible, no permitas que tire comida y predica con el ejemplo.


Enséñale a comer de forma saludable y evita que consuma golosinas y comida basura como norma general. Aunque la comida de verdad es algo más cara que los productos ultraprocesados, es una forma de enseñarles a consumir de forma responsable. Y poner algo más de dinero en su dieta no es un gasto, es una inversión en su salud tanto ahora como en el futuro.


Introduce el reciclaje en su día a día


Fomenta la cultura del reciclaje, enseñándole cómo reciclar en casa y en otros lugares y explicándole por qué es necesario hacerlo. 


Acostúmbrale a reciclar el papel que utilice para escribir o dibujar, utilizando las dos caras. Y procura que no te vea imprimir hojas y hojas de manera innecesaria. 


La semilla del consumidor responsable


Explícale que no debe contratar servicios o comprar artículos por Internet sin la autorización de uno de los padres. 


Cuando estén frente a la televisión, enséñale a enfrentarse a los anuncios de manera responsable. Edúcale para que sepa darse cuenta de las manipulaciones publicitarias más comunes y estate atento a sus reacciones frente a los anuncios, de ese modo podrás contrarrestar las peticiones insistentes de artículos y sus correspondientes pataletas.


Niño delante de la televisión


Enséñale que los artículos que se compran deben estar en buenas condiciones: envase íntegro, sin roturas ni manchas, con todas sus piezas o componentes, etc.


Revisa el carro de la compra para comprobar que no ha introducido artículos por su cuenta y que no son necesarios. Si lo ha hecho, ve con el peque a devolverlos al lugar del que los ha tomado y explícale lo que supone esa compra en la economía familiar, a lo que tendrá que renunciar si le permites llevárselo (una cosa u otra), o si no lo vas a comprar porque es perjudicial para su edad o su salud. Una forma de quitarle la tentación de que ponga en el carro lo que no es necesario, es pedirle ayuda para que vaya colocando dentro de él lo que sí es imprescindible.


Edúcale para que no abra ni dañe los artículos que están expuestos en los establecimientos, primero porque no son suyos y segundo porque implica que papá y mamá tendrán que pagarlos... y no podrán comprarle lo que realmente quiere.


Muéstrale lo que es la fecha de caducidad y lo que significa. Si ya tiene claro el concepto de las fechas, rétale para que a la hora de comprar busque los que tengan más plazo para consumirlos.


Es importante que dentro de la educación en el consumo responsable, se enseñe al niño que debe tratar con respeto y educación a las personas que atienden al público o que les prestan un servicio.  


A vueltas con la tecnología


Recuérdale que muchas de las descargas de juegos y herramientas de Internet no son gratuitas y que deben leer y comprender antes de descargárselas, o mejor todavía, que pídele que consulte siempre a un adulto responsable (los hermanos adolescentes no entran en esta categoría de adulto responsable, claro).  


Si la vas a dar un teléfono móvil para su uso, conciénciale para que no lo vea como un juguete, sino como una herramienta que tiene una utilidad y un coste asociado.


Niña con un móvil


Contrata tarifas económicas y ponle restricciones de uso. Muéstrale los minutos y megas de los que dispone y avísale de que cuando sea agoten, no tendrá más a su disposición. Enséñale a administrar los datos y minutos de los que dispone. 


Pon contraseñas seguras en tus dispositivos y cámbialas con frecuencia, porque los niños son verdaderos linces a la hora de detectarlas... y de usarlas. 


Madre con niños pequeños y una tablet


Establece un usuario diferente y sin privilegios en los ordenadores de sobremesa y dispositivos móviles a los que tenga acceso tu hijo. De esa forma restringirás en cierto modo los posibles daños. 


Establece controles parentales en los dispositivos que usen los niños y procura que no empleen los que tú o tu pareja utilicéis para vuestro trabajo o en los que haya material delicado, como accesos a cuentas corrientes, etc. 


Muéstrales lo que es el Código PEGI (Pan European Game Information) que es el que te informa de la edad máxima en la qu ese recomienda el juego, indicándoles que los juegos que elijan deben estar en su rango de edad por su propio bien. 


Todo este arsenal de tips son generales y podrás aplicarlos según la edad del niño y añadir muchos otros para completar su educación en el consumo responsable.


Espero que estas ideas te sean útiles y me encantaría que dejases tus opiniones y aportaciones al respecto en nuestro apartado de comentarios.


Y para terminar quiero darte las gracias por el tiempo que has dedicado a leer este post.





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La primera vez que apareció el post Ideas para que los Niños Consuman de Forma Responsable fue en el blog de La Meiga y Su Caldero.


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